La desilusión es lamentable, más aún cuando se trata de jóvenes estudiantes como es el caso de los estudiantes de la Universidad Alas Peruanas, centro que una disposición de SUNEDU dispuso hoy el cese de sus operaciones por no cumplir con los requisitos para su funcionamiento que exige la legislación peruana.
Claro que la medida no se tomó de un día para otro. Desde hace dos años atrás Alas Peruanas trató de ajustarse a las exigencias, cerrando incluso programas en el interior de la República, afectando a otro tanto de jóvenes, pero al final no alcanzó la autorización.
Recordemos que este proceso del Licenciamiento de las universidades se inició años atrás en el país. Hace unos diez años, atrás el Tribunal Constitucional estipuló la necesidad de crear la superintendencia para dicho menester. Y así se hizo.
De otro lado, en el Perú también rige la acreditación de las carreras universitarias, incluso por organismos internacionales, que miden la calidad de la enseñanza a la par de las mejores universidades del mundo. Como consultores en comunicación corporativa en universidades peruanas hemos visto este proceso de cerca y lo conocemos.
Si bien hoy tenemos esta mala noticia y decepcionante para los jóvenes estudiantes de Alas Peruanas, echar la mirada a un futuro no muy lejano para las nuevas generaciones de hombres y mujeres del país, con niveles de formación y conocimientos, nos augura que podremos figurar en los mejores rankings de educación superior para beneficio de toda la sociedad.
La moraleja del momento: no hay mal que por bien no venga.